Costa Rica, Viernes 20 de febrero de 2009
Damnificados usarán 52 de 200 viviendas regaladas
Gobierno destina a precarios casas donadas por terremoto
‘Un techo para mi país’ denuncia atraso con terrenos y lista de beneficiarios
Gobierno promete usar donaciones para reparar escuelas y casas
La mayoría de las casas provisionales que se financiaron con donaciones de particulares y de empresas no llegará a los afectados del terremoto de Poás.
María Luisa Ávila, rectora del sector social y ministra de Salud, confirmó que solo 52 de las 200 viviendas construidas por la fundación “Un techo para mi país” se asignarán a los damnificados.
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Agregó que las 148 casas restantes se entregarán a familias que viven en ranchos o tugurios.
La funcionaria alegó que muchas personas afectadas por el terremoto ya se reubicaron donde familiares o se fueron a alquilar con el subsidio del Instituto Mixto de Ayuda Social (IMAS).
“Cuando la gente entendió que no era necesario estar en un albergue para que fuera beneficiario de una vivienda permanente, prefirió irse a una casa, alquilar un cuarto o irse con un familiar.
“Es lo lógico. La gente en los campamentos es exclusivamente quienes no tienen opción”, declaró Ávila a La Nación el pasado miércoles.
Según datos suministrados ayer por el Gobierno, en la actualidad permanecen 370 personas en ocho albergues.
Ávila añadió que ya conversó con los encargados de la fundación “Un techo para mi país” para destinar las viviendas restantes a familias de precarios.
“Yo lo hablé con los muchachos (de la fundación): se había pedido para 200 (familias), pero todavía hay muchos tugurios y precarios y que ellos pueden seguir con su proyecto, y se da una rendición de cuentas a la gente que puso dinero”, dijo Ávila.
Anoche, la ministra de Vivienda, Clara Zomer, no quiso ahondar sobre este tema.
No obstante, advirtió: “A mí no me funcionan estas casas (provisionales) para erradicación de tugurios porque yo ocupo soluciones definitivas para las familias”.
Desconoce plan. Las palabras de la ministra Ávila sorprendieron ayer a Patricio Morera, representante de “Un techo para mi país” .
“Tendría que escucharlo de ella (María Luisa Ávila). El objetivo del proyecto, desde el inicio, siempre fue que las casas fueran para los damnificados”, añadió .
Morera denunció que la instalación de las casas temporales se atrasó por culpa del Gobierno.
“El IMAS no ha dado la lista de las familias beneficiarias, ni el Ministerio de Vivienda ha conseguido los terrenos para instalar más casas”, agregó Morera.
Actualmente, solo hay 15 de los 200 techos provisionales instalados en la plaza de Poasito, allí la fundación ubicará 25 casas más.
Por ahora, esta organización busca terrenos con la ayuda de alcaldes de las zonas afectadas para ubicar a más familias.
Sobre la denuncia de Morera, el presidente del IMAS, José Antonio Li, indicó que la lista de beneficiarios de estas soluciones debe darla el Ministerio de Vivienda.
“La ubicación de los hogares en las casas provisionales es competencia de Vivienda”, aclaró.
Donaciones. Cada cada provisional costó $1.600. Están hechas de madera y tienen un área de 18 metros cuadrados.
Su construcción se financió con $200.000 donados por la empresa privada y particulares, y $70.000 girados por el Gobierno.
La campaña captó fondos con la idea de que los damnificados se mudaran de los albergues a las casas provisionales, mientras el Gobierno construye sus casas definitivas.
Zomer indicó ayer que se necesitan 782 casas nuevas para hogares quienes lo perdieron todo.
FOTOS
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Nancy Ulloa, y sus cinco hijos, es una de las 15 familias de Poasito que habitan en una casa provisional en la plaza del lugar. Pronto se colocarán otras 25 viviendas para reubicar a pobladores de la zona. Marvin Caravaca.
Damnificados se quejan de falta de ayudas
Sin lote dónde construir
nombre María Isabel Vargas
vecina Poasito
“Nos dijeron que tenemos un bono de vivienda preaprobado, pero este lote donde teníamos nuestra casa parece que no es seguro, entonces, no tenemos dónde construir, y nadie nos ha dado nueva información sobre esto”.
Con poca comida para sus hijos
nombre Damaris López
vecina Vara Blanca
“Salí del albergue a la casa de mi mamá con mis hijos. No tengo empleo, y vine a pedir un diario porque somos ocho personas, pero me dieron pocas cosas. Pedí 15 huevos, y me los negaron, y no tengo ninguna noticia del IMAS”.
Solo hay granos para cocinar
nombre Yanneth Tenorio
vecina Poasito
“En el albergue (de Poasito) hay muchos granos y latas, pero ya nos faltan verduras, condimentos, carnes. No tenemos nada para acompañar las comidas que preparamos para los 101 damnificados a quienes atendemos”.
Fuente: http://www.nacion.com/ln_ee/2009/febrero/20/pais1753203.html
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